Bodegueros buscaron el apoyo de Rodolfo Suarez para bajar el proyecto de tolerancia cero

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El gobernador recibió al presidente de la COVIAR, José Alberto Zuccardi, que propone una alternativa a la iniciativa que se está tratando en el Congreso. La intención es que la presenten legisladores nacionales por Mendoza y de otras provincias vitivinícolas

«No hay justificación para tener una ley de tolerancia cero», indicó el presidente de la COVIAR, José Zuccardi, tras el encuentro que él y otros referentes del mundo del vino, el turismo y la gastronomía mantuvieron con el gobernador Rodolfo Suarez.

En la reunión le plantearon la posibilidad de presentar en el Congreso de la Nación un proyecto alternativo al que se está debatiendo en comisiones de Diputados con intenciones de mejorar la actual Ley de Tránsito 24.449 pero sin modificar la tolerancia de hasta 500 miligramos (0,5) de alcohol por litro de sangre para conductores.

Las iniciativas que actualmente se están debatiendo en la Comisión de Transportes de la Cámara de Diputados, que preside el jujeño Jorge Rizzotti (UCR), establecen el alcohol cero al volante, con el objeto de prohibir en todo el país que las personas conduzcan después de haber ingerido bebidas alcohólicas.

Para Zuccardi, se trata de una «ley demagógica» por lo que la propuesta es redactar una «ley de consenso que permita no cambiar los hábitos de vida de los argentinos». «El vino es la bebida nacional, es parte de la cultura», dijo el empresario.

 

El apoyo de Suarez y los legisladores por Mendoza

Según dijeron desde la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR), el gobernador «se comprometió a apoyar y a hablar con otros mandatarios y legisladores para plantear una ley de consenso que nos permita no ir en una posición de confrontación al Congreso sino con una alternativa para que podamos confluir los distintos sectores».

«No se puede impedir que en la mesa familiar esté el vino. Eso es dejar que bebidas azucaradas, que causan muchísimos problemas de salud, tomen su lugar», analizó Zuccardi.

Respecto de la tolerancia cero, el bodeguero consideró que, «diferentes circunstancias propias del funcionamiento de los aparatos (alcoholímetros) hacen que no sea realmente aplicable»; mientras que además consideró que «se plantea como una solución a los accidentes fatales y no es verdad».

«Está comprobado que por debajo del 0,5 no hay problemas», refutó Zuccardi. «Se está prometiendo algo que no va a ocurrir. Se estigmatiza el consumo de vino en este caso y creemos que el problema está en la noche y con cantidades que superan largamente el 0,5», analizó.
Además, advirtió, «hemos estudiado la tolerancia en los países que menos accidentes tienen y están entre 0,5 y 0,8. No hay justificación para tener una ley de tolerancia cero» en Argentina.

La actual Ley de Tránsito 24.449 establece, para cualquier tipo de vehículos, una tolerancia de hasta 500 miligramos (0,5) de alcohol por litro de sangre; para motocicletas o ciclomotores, hasta 200 miligramos (0,2); y para transporte de pasajeros de menores y de carga, alcohol cero.

En tanto, la tolerancia cero con el alcohol ya se implementa en siete provincias y 13 localidades del país.

Al proyecto lo impulsan asociaciones civiles y familiares de víctimas de accidentes de tránsito, algunos especialistas y la Agencia Nacional de Seguridad Vial, cuyo director es Pablo Martínez Carignano.

 

Reunión de la COVIAR con legisladores nacionales

Ya en junio pasado, la COVIAR había organizado una charla con legisladores nacionales del Frente de Todos y de Cambia Mendoza para asesorarlos en función del rechazo a la tolerancia cero.

La finalidad fue dotar de herramientas a los diputados y senadores mendocinos para que puedan tener argumentos suficientes para rechazarla cuando participen de los debates en el Congreso.

De aquel encuentro participaron Alfredo Cornejo, Mariana Juri, Jimena Latorre y Pamela Verasay de la UCR; Omar de Marchi del PRO y Marisa Uceda y Adolfo Bermejo del FdT.

Fabián Pons, presidente del Observatorio Vial Latinoamericano, disertó ante los diputados y senadores en ese entonces. La clave, decía, está en trabajar en la «prevención, en saturar de controles, sumar alcoholímetros y generar laboratorios para calibrar».

«Lo importante es que ese conductor no mate, no castigar después de que ya lo hizo», advirtió.

 

Fuente: diariouno.com.ar

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