Esta semana visitará Mendoza una comitiva de la FAO para concluir el acuerdo que se inició en Chile. Entregará financiamiento para la Provincia.
La llegada de estos fondos complementará el trabajo que se ha realizado con el equipo de la compañía israelí Mekorot. «Ellos guían y asesoran metológicamente en un plan que lo hacemos nosotros en Irrigación con nuestra gente», aclaró.
«El plan hídrico con la gente de Mekorot apunta a que hagamos una prospectiva de la oferta de acá a 20 años; cuál va a ser la cantidad de agua disponible a cada lugar; cuál va a ser la demanda con alternativas. Habrá balances hídricos prospectivos y finalmente las acciones estructurales y no estructurales para que esa menor cantidad de agua atienda una demanda mayor», continuó.
En ese sentido, explicó que el objetivo buscar es implementar medidas de eficiencia. «A veces pasa por tecnología, por manejo del agua o simplemente por conducta«, sostuvo.
«Tenemos muchísimos datos pero muchas veces no se miden. Hay que medir para manejar mejor el recurso: no para cobrarlo, sino para poder gestionarlo mejor. A la planta le llega la mitad de agua de lo que largó el dique, para el uso poblacional pasa lo mismo, y el reuso que podemos hacer no es el mismo», resaltó.
Marinelli consideró que «hay que hacer adaptaciones de lo legal, lo técnico y de lo económico» y, por esto, continúa la etapa informativa del plan hídrico para escuchar opiniones y después encauzarlas con los datos que surgirán de los análisis de oferta y demanda de agua.