El Gobierno apunta a seducir a empresarios sureños mostrando los beneficios de El Baqueano

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El director de Emesa, Pablo Magistocchi, será el encargado de entusiasmar a referentes de la Cámara de Comercio de San Rafael a los que les mostrará cómo dinamizará la economía, la mano de obra y a futuro la producción energética el dique El Baqueano

Rodolfo Suarez se ilusiona con llamar a licitación del dique El Baqueano en el primer trimestre del 2023. Pero para que eso sea posible antes tendrá que mostrar que los estudios de impacto ambiental de la obra cumplen con los requisitos, y tendrá que entusiasmar a los empresarios lugareños para que respalden ese aprovechamiento hidroeléctrico que hará con parte de los fondos de Portezuelo del Viento.

Esa tarea es la que asumirá en los próximos días el titular de la Empresa Mendocina de Energía (Emesa), Pablo Magistochi, uno de los funcionarios que más conoce y ha estudiado el dique que se proyecta en el río Diamante. Él se reunirá esta semana con empresarios de la Cámara de Comercio de San Rafael, con los del rubro de la construcción y también con académicos.

La estrategia del Gobierno es ir generando avales a la obra en el sector privado, ya que en definitiva serán esos empresarios los que deberán responder a la demanda de mano de obra en las 3 partes de la obra: la generación de la Casa de Máquina, el entubado para conducir el agua hasta ese lugar y el paredón de 68 metros de altura del dique propiamente dicho.

En Casa de Gobierno saben que tienen el respaldo político del intendente Emir Félix, que ya lo manifestó públicamente cuando se conoció la idea de Suarez de destinar la mitad de los fondos de Portezuelo del Viento al dique El Baqueano, pero pretenden agotar todas las consultas de manera de no dejar ningún cabo suelto que a futuro pueda poner en riesgo o sembrar dudas sobre la conveniencia de esa obra.

En paralelo, ya se abrió el concurso para que una consultora analice los estudios de impacto ambiental que ya se hicieron durante las cuatro estaciones en la flora, la fauna, el aire, los suelos, los cursos de agua, el patrimonio y los aspectos arqueológicos, paleontológicos y sociales de la zona en la que se construirá la hidroeléctrica.

A ese concurso llamó el Fondo Fiduciario del Plan de Infraestructura Eléctrica de Alta Tensión, Zonas Aisladas y Zonas a Desarrollar (Fopiatzad) y ese es el último paso previo a la licitación de la obra que completará el Circuito Diamante en San Rafael.

Luego de estos informes, realizados in situ y con equipos especializados, se debe cumplimentar el paso de la Manifestación de Impacto Ambiental, que se presenta a la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial. En esta paso, además, se realizan consultas a reparticiones como el Departamento General de Irrigación, Recursos Naturales y la Dirección de Hidráulica, y se tramita una audiencia pública que podría darse a fin de año.

 

El Baqueano en números

Según las estimaciones de Emesa, con El Baqueano, Mendoza aumentará 15% la capacidad del embalse del Complejo Diamante y aportará 112 MW de potencia, que servirán para abastecer a unos 60.000 hogares con energía limpia y sin huella de carbono.

La obra tiene un presupuesto de 525 millones de dólares, y se especula con que pueda generar 800 puestos de trabajo directos, y otros 1.500 indirectos.

Ese proyecto que fue planificado por la ex Agua y Energía hace más de 40 años, se actualizó y reformuló para la conservación del medio ambiente y la corrección de los planos originales, que presentaban riesgo de aludes, ya que se emplaza en una formación geológica joven y de constantes cambios.

En 2018, se efectuaron nuevos estudios de suelo para determinar la localización y el modo de edificación más seguros. Así, se determinó que la histórica propuesta de Agua Mora quedaba descartada y que se construirá una presa de hormigón de gravedad HCR (hormigón compactado con rodillos) en una zona conocida como El Imperial.

En El Imperial está previsto construir una presa de 68 metros de altura, con una conducción en túnel de 13,8 kilómetros de longitud y un diámetro 5 metros, hasta la central El Baqueano, situada aguas arriba de la cola del embalse Los Reyunos.

En junio 2022, Emesa abrió el concurso para realizar los estudios de geología, geotecnia, geofísica, ensayos de laboratorio y topografía, en conjunto con el Fondo Fiduciario del Plan de Infraestructura Eléctrica de Alta Tensión de Zonas Aisladas y en Desarrollo (Fopiatzad).

Además, se concretó el estudio de línea de base del medio biótico, lo que permitió actualizar los datos de la flora y la fauna en la tierra y el agua, además de ciclos migratorios, áreas naturales protegidas, humedales y cauces de agua.

Ahora, el próximo 25 de octubre se realizará la apertura de sobres de los oferentes para hacer la manifestación de impacto ambiental, tarea que se presume podría tardar unos 60 días más, por lo que podría estar lista a fin de año o los primeros días del 2023. Allí se podría llamar a licitación de las firmas que podrían construir el dique, pero se preve que el ganador de esa licitación se conozca recién 6 meses más tarde, cerca de septiembre del 2023.

 

Fuente: diariouno.com.ar

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