El sindicato que nuclea a los estatales anticipó que será uno de sus pedidos principales cuando se sienten a negociar los salarios el próximo jueves. Buscarán determinar los porcentajes para el primer trimestre del 2023. Es la primera vez que lo plantearán en toda la gestión Suarez
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) decidió pedirle al Gobierno una última instancia de revisión salarial en diciembre, para cerrar el año con una pauta definida de cuánto van a ganar en enero, febrero y marzo de 2023. En los ciclos anteriores, las paritarias comenzaron recién en el tercer mes del año, y aseguran que no están dispuestos a que eso se repita tras un pico inflacionario de tres dígitos como el que se espera en la Argentina.
Ese tipo de encuentros, casi al filo de las vacaciones, ya se dio en los gobiernos de Celso Jaque, “Paco” Pérez y también de Alfredo Cornejo, según explicaron fuentes de la agrupación; pero hasta el momento no se lo han planteado al gobernador actual y –al menos para ATE- será la primera vez que lo lleven a la mesa de diálogo en todo lo que va de esta gestión. Es uno de los primeros planteos que se colarán en el debate de este jueves, cuando vuelvan a sentarse cara a cara.
Como aclararon, la idea es no transitar el primer trimestre sin aumentos, ya que se está dando el peor año de los últimos 30 en términos de inflación. También ese es uno de los puntos que marcaron desde el propio equipo de Suarez, quienes aceptaron tener instancias revisoras “en cuanto el IPC subiera demasiado”, y como empezaron a cumplir con la convocatoria a reuniones durante esta tercera semana de octubre.
Según pudo saber este diario, la intención de ATE es que todo lo que proponga el Ejecutivo sea bajado a las bases para que los trabajadores voten por aceptación o rechazo; aunque es bien sabido que la tradición del grupo de trabajadores es bajarle el pulgar, siempre, a la primera propuesta que llega desde el Gobierno.
El método que vienen utilizando para definir es el de “mano alzada”. Hay un delegado por cada 50 miembros de las bases y cada uno de esos delegados posee un voto. Para que una propuesta gane tiene que cosechar la adhesión de una mayoría simple (la mitad más uno), aunque con una salvedad: para aceptar un ofrecimiento, esos avales deben ser de, por lo menos, el 60% de los participantes.
Inflación: desafío casi imposible en todas las provincias
Los cálculos de ATE dicen que, en este momento, sus afiliados están perdiendo cerca del 5% frente a una inflación que en Mendoza trepó al 68,4% durante septiembre -según números de la DEIE-. Extraoficialmente, referentes gremiales aseguran que otros sindicatos están perdiendo hasta un 15% en ese desfase, por lo que –entienden- se torna imperioso llegar a un buen arreglo en la negociación que arranca este jueves.
La inercia de precios no parece tender a la baja pronunciada que pretenden tanto Gobierno como trabajadores. Y aunque desde la cartera económica nacional señalan que ha habido dos decrecimientos consecutivos, evitar el 100% interanual parece casi imposible, ya que las últimas cifras relevadas rondan el 86% y aún quedan tres mediciones mensuales.
Es por ese volumen inusitado de la inflación que los gremios ya se pusieron en guardia y comenzaron a elaborar nuevas estrategias, como también empezaron a aliarse para buscar algunas salidas en conjunto. De hecho, la próxima semana habrá un encuentro federal de trabajadores estatales en Ciudad de Buenos Aires, al que las autoridades de ATE a nivel local fueron invitadas. “No hay mucha salida a esto, y se ve en todas las provincias, no sólo en Mendoza”, contaron a UNO.
Sagasti le apuntó a Suarez por los sueldos
La paritaria se vuelve a meter en la política partidaria de la provincia, como ocurrió a principios de agosto, cuando la tensión subió tras los casi cinco días de paro que dispuso un gran número de estatales. Esta vez, coincide con el inminente tratamiento del Presupuesto 2023, respecto al cual el PJ asegura tener un fuerte enojo (por la decisión de no participarlos en el roll over), y hasta amenaza con rechazar el pedido de endeudamiento hecho por el oficialismo.
Este lunes, por el 77º aniversario del Día de la Lealtad, el peronismo mendocino se reunió en un acto en el Salón Báltico de Guaymallén. Tras dar su discurso ante los “compañeros”, la presidenta del espacio, Anabel Fernández Sagasti, cargó contra el gobernador Suarez y le pidió indirectamente qe “tenga empatía con los trabajadores”. Para eso, recurrió a una comparación con el mandatario bonaerense Axel Kicillof, quien acaba de cerrar una suma cercana al 90% para sus empleados estatales.
En Mendoza, el jueves 20 de octubre será el debut de la nueva mesa paritaria local, con la presencia de SUTE, ATE y Ampros; precisamente los tres sindicatos mayoritarios de la provincia. Las negociaciones seguirán hasta el martes 25, cuando se cierre con funcionarios de la Justicia, Casinos y el EPAS.
Fuente: diariouno.com.ar