Argentina y Brasil van por lograr una moneda única.

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En los últimos días trascendió la noticia de que Argentina y Brasil trabajarán en el proyecto de tener una moneda común. El tema ha sido tratado en el ámbito de la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) que se desarrolla en Buenos Aires. Desde FM Vos (94.5) y Diario San Rafael entrevistamos al economista Miguel Ponce para que opinara al respecto. “Yo vengo diciendo que desde el 2008 Argentina viene trabajando con Brasil en la utilización de sus propias monedas para evitar el uso de dólares en el intercambio comercial. En ese momento los bancos centrales y los gobiernos firmaron un acuerdo que se denomina SML, que es la utilización de reales para las compras que los brasileros hacen en Argentina, y el pago en pesos de lo que los argentinos adquieren de la producción de Brasil.

Este intercambio comercial obviamente requiere que los bancos centrales, en función de la diferencia del tipo de cambio frente al dólar de cada una de sus monedas, al final del año en función de esas variaciones vean cuál ha sido la relación de las transacciones en dólares para determinar si ha sido favorable a Argentina o a Brasil. En estos momentos nuestro intercambio comercial frente a Brasil es deficitario y el primer asunto a tener en claro es entonces que Brasil tiene una inflación anual del 5% y nosotros estamos a noventa puntos de diferencia. Por otra parte ellos tienen en su Banco Central trescientos cincuenta mil millones de dólares y nosotros estamos viendo si llegamos a cinco mil de reservas líquidas; es una diferencia inconmensurable para llegar a una moneda común en un área de libre comercio como podría ser el Mercosur. Miremos lo que ocurrió en Europa, que les llevó treinta y cinco años poder llegar a utilizar el euro, y se fijaron duras condiciones de convergencia macroeconómicas que debían ser llevadas a cabo en ese lapso hasta permitir que cada país interesado en la utilización del euro tuviese un determinado tipo de inflación, un determinado porcentaje de gasto público, y una determinada cantidad de emisión. Es decir que la moneda única es una consecuencia de la convergencia de las variables macro que permiten una homogeneidad en el tratamiento del intercambio comercial. Esto en América Latina, particularmente en Argentina, está muy lejos de ocurrir. Entonces, en algún momento, tras varios gobiernos y décadas por delante podríamos tener una moneda común”.

Ponce agregó que “el gobierno anterior también lo intentó, pero el Banco Central dijo que de ninguna manera era factible, al igual que ahora, que lo han dicho de manera más diplomática. Casi textualmente comentaron que trabajarán y estudiarán la forma para tener una moneda del sur del continente, por eso la moneda se llamaría Sur, con el objetivo final de poder lograrlo”.
Por otra parte, esta idea de moneda común en países como Chile ya ha sido criticada; Mario Marcel, Ministro de Hacienda de Chile, sostuvo que “para calificar la idea como buena o mala, uno debería tener el conjunto de los detalles de la idea”. Más contundente fue el expresidente del Banco Central y decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, José de Gregorio, que adelantó que “el anuncio de la moneda única es lo más absurdo que he escuchado y poco creíble”. Al respecto Ponce agregó que esta moneda única entre Argentina y Brasil está muy lejos de poder ser posible; igualmente repito que no tenemos que privarnos de la ilusión de que, en algún momento, dentro de varias décadas esto sea posible”.

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